Claroscuro Estreno: 2008

“Narramos un viaje interior por el abismo del individuo y su soledad. De sus fantasmas y sus dolores damos fe. También de su resurgimiento, de su gracia y su belleza. La vida como continua experiencia transitoria, como cambio a nuevas etapas. El viaje del proceso de la vida hacia la muerte. Y viceversa…”

A través de sus múltiples viajes y accidentalmente Micrómegas topa con la historia de una soledad, de un ser perdido en el universo personal, de un abismo y nos realiza una reflexión en torno a la vicisitud del ser humano , de sus abismos y sus subida  de los infiernos.

Testimonio de la experiencia o bajada a los infiernos y su remontada. El viaje interior y la limitación de la existencia.

 

“A lo largo de toda la pieza observamos  a una mujer que se acerca a su propio altar donde se hayan presente, pasado y futuro .  Una visión de la vida, como nostalgia como abandono. Volver a casa después de tanto tiempo. Vuelta de Ulises, recuerdo, ausencias. Confesión de penas, de alegrías de pérdidas de todo. De este reencuentro surge el abrumador peso de la existencia, el caos, el exceso de todo y nada, de soledad y angustia. La mujer se vuelve caos y angustia. Se vuelve insecto de sí misma para aplastarse a sí misma, para aniquilarse tal cual es “ahora”. Ya  en el lecho de muerte el proceso de catarsis de una mujer, catarsis de la voz, el que canta su mal espanta. Renovación. La voz como conexión con la raíz vital, con el grito animal, con la alegría de vivir, con el expresarse en el mundo. Al igual que la serpiente, que se frota contra el tronco para dejar caer su piel muerta y lucir una piel nueva. Renovación y aceptación de lo pasado, recuerdo. La Naturaleza como purificación, salir hacia fuera a la luz. Nuevo mundo, por tanto ,y nueva piel. Paso a la intuición, a la alegría de ser y existir.”

 

“Inspirada en personajes como Kazuo  Ohno, , Yma Sumac o Diamanda Galas o películas referentes como la pasión de Juana de Arco de Carl Dreyer o el documental Microcosmos y basado principalmente en un ensayo de Voltaire, Micrómegas, y poemas de Blanca Varela he intentado conjugar la necesidad de organizar concepciones que creo son contemporáneas: la manifestación del descontrol del ego y la psique. El olvido del individuo animal y la carencia de religiosidad. Todo esto  a través del movimiento,  algunos textos y canciones, que me han ayudado a expresar en diferente modo emociones que pasan desde la impotencia, la ira, y la belleza.

Rocío Guzmán